miércoles, 29 de agosto de 2012

Secuelas de una decepción amorosa

Levante la cabeza y estaba ella, sí ella. Esperando para nuestro almuerzo pactado conteniendo una emoción inevitable, sin decirnos a nosotros mismos lo que nos causaba la risa. Ella freno su emoción con una noticia que me sepulto, me voy a trabajar a provincia. Al instante pensé que era una broma cuando recordé que estaba postulando para un cargo en Trujillo. Mis emociones entonces emparejaron los
 suyos y solo atine a cambiar de conversación para pasar desapercibido la nostalgia que embargaba la situación. Sabía que era el gran día, mi cumpleaños y un gran regalo, un almuerzo con ella, ahora no sabía si feliz por el almuerzo o triste por su partida.
Llevaba casi 5 días de conocernos pero congeniamos al instante, yo lo note en ella a la vez lo sentí por mí. Ya nada queda decir, ya nada queda escribir a la musa de esta situación confusa. Mis palabras ya no tienen profundidad porque me invade la sensibilidad.
Escribo porque sé que no leerá y mi voz no la detendrá. Porque la carta esta jugada y mi posibilidad resquebrajada. Porque su decepción amorosa la llevo a ser dudosa.

sábado, 18 de agosto de 2012

Marte y Venus


Entró esos radiantes rayos por la ventana corrediza de la habitación alumbrando como Cristo en el Sinai pero yo, no cogía una piedra. Mis brazos pasaban sobre ella. Ella a la que llamaré María. Contemplando su sedosa piel, ya sin adrenalina para continuar;  despertó, me miró y se miró, entonces recordé Génesis y el inicio de Eva. Sí, unas horas antes fui potro salvaje sin reproche y ahora era un desconocido. Eso a lo que ella llama pudor.
No pronuncié palabra y mire a la perfección echa persona, echa una mujer. Recordé entonces cuando conocí el infinito. Navegué, acaricie la estrella y sus dos cometas. Bese el infinito y no supe que besaba. Ella se aproximo al sol, tal fue el acercamiento que empezó a sudar. Ahí entendí entonces que era de Venus y yo de Marte. Mi mundo es cálido y fogoso mientras el suyo pasividad.
Mi exploración perduró por meses de los cuales su pudor poco quedaba. Entonces supe que nuestros mundos estaban alejados y no pertenecíamos entre sí. Más bien entendí que María era del firmamento, era del universo. Era de nadie y de todos a la vez. Fue entonces que Marte se alejó y busco su lápiz a la rapidez.

miércoles, 15 de agosto de 2012

Episodios

Mi miraba penetraba sus ojos y pude ver su alma. Fue una lanza que impregno en su ser, en su yo. Pude ver su pasado, pude ver la sombra que oculta bajo esa sonrisa gris donde no hay carcajada, solo sonrisa porque risa era mucho pedir. Sus ojos tenebrosos y temblorosos miraban el infinito alternando con el mar. Era fácil cruzarse con el rey de las tinieblas que cruzarse con mi mirada. Y es que su dañado corazón no conocía de alegría, de sinceridad, de fe. Con aquella mirada pude echar fuera sus demonios. Entonces sus brazos apoyaron sobre mis hombros y su rostro por izquierda. Fue momento de desconsuelo donde el llanto reinaba aquel instante y la calma navego al inframundo. No importo sus incesantes gemidos de dolor ni sus imparables chorros que bailaban por sus narices, humedeciendo así mis hombros. Solo quería un abrazo, un abrazo sincero, esos que escuchaba y nunca sentía. Yo, dispuesto a dárselo, así lo hice. Sin entenderlo al instante me soltó. Se alejo. Y es que pensó que era un fornicario más, un codicioso mas de tan bella silueta y sobresalientes dotes.
Confundido por un momento encontré la causa y continué con la mirada hacia su pasado y ella, esta vez miraba, hacia su futuro.
Regresó la serenidad hacia ella, a la que llamare Sofía.
 Me invitó un café en Starbucks de la av. Bolívar. El encuentro en el establecimiento fue no más de 1 hora. Pensando así que terminaría nuestra conversación, pero Sofía tenía algo mas planeado para mí. Salimos y parados frente al parque intente despedirme con un ósculo en su mejilla derecha la cual lo evitó y me dijo: “Te invito a mi casa, estamos cerca”. Era cierto, estábamos a 10 minutos en su auto.

Al instante remato con una pregunta: ¿tienes miedo?, estaba seguro que fue el arma letal para evitar un no. Y dije: “Esta bien”.
Introdujo la llave, giro una y dos veces en señal de seguridad. Pregunte si no había nadie y me respondió con total naturalidad; Vivo sola.
Piso parquet, mueble de cuero, mesita en el centro de la sala para colocar cualquier vaso o copa. Esta ultima porque tenia un mini bar aunque me confeso no lo utilizaba a menudo. No dude en sus palabras.
Deseas algo de tomar, me dijo. “Un poco de café”. Escucho la respuesta y al instante voltio y me dijo: ¿Mas?, pensé que pedirías un vodka o un whisky, es lo que tengo. Un vodka, dije. Regreso entonces con dos copas y no supe mas que hacer. No había quedado nada de ese episodio triste. Entonces desconocí la escena. Escuche a lo lejos decir: Johan, Johan. Abrí los ojos, era mi hermano que me despertaba.


domingo, 12 de agosto de 2012

Amor Platonico

Huir sera la Salida

Llamas la atención y vas enfrascándome
irme es importante es urgente
siento que estas engañándome
me enamoro no soy robot soy gente.

Tu gesto, risa y sonrisa
semanas lo tengo en mente
pero tengo que marcharme de prisa
porque enamorarme no quiero simplemente.

Te juro no es locura
de esas que te hice saber
no es un pensamiento
es un lindo sentimiento.